Bueno, en estas idas y venidas, hasta yo me encuentro un poco perdido, y son tantas cosas las que nos acontecen que es difícil resumirlas en unas líneas.
Ahora nos encontramos ya en Bolivia después de tres intentos de atravesar la frontera por el paso de Ollagüe y sus respectivos retrocesos al punto de partida. Una vez remolcados por el amable Jaime, que nos recogía ya entrada la noche y dispuestos a echar una cabezadita en nuestro buen amigo japonés, que como cabía de esperar sigue haciendo de las suyas, en esta ocasión recalentándose lo más grande y tirando todo el líquido del radiador, en fin, una odisea. Al día siguiente más de lo mismo, y en el mismo lugar, aunque ahora ya íbamos prevenidos y volvimos por nuestro propio pie. Por lo visto es que este paso no le gustaba a nuestro amigo y hemos tenido que buscar otro, el de Tambo Quemado. Por cierto el sitio espectacular, lagunas, volcanes, flamencos, llamas y un sinfín de atractivos naturales, aunque mi mirada se queda clavada en el imponente volcán del Nevado Sajama, a escasos kilómetros de la frontera y cumbre más alta de Bolivia, qué casualidad que por aquí si quería pasar el amigo, al final va a ser que me quiere bien.
Como no podía ser de otra manera la primera parada fue en el pueblo de Sajama. Tras los pertinentes permisos de entrada al Parque Nacional y de recabar la información necesaria, esa misma tarde me fui para la montaña con intención de alcanzar a un guía con un Alemán que habían partido el día anterior. Sobre el papel parecía un plan perfecto pero normalmente la realidad suele variar un poco. En esta ocasión a mitad de la tarde se cubrió el cielo y comenzó a nevar levemente, aún estaba bastante lejos del “Campo Alto” a 5700m, donde se encontraban mis supuestos compañeros. Durante un largo tiempo dudé si volverme, pero finalmente decidí quedarme allí mismo, a unos 4500m y esperar a ver como evolucionaba el tiempo por la noche. A las 2:30 de la madrugada, con el cielo estrellado, salí dispuesto a coger a mis compañeros y hacer la cumbre. En apenas dos horas me planté en el campo alto, al ver su tienda vacía continué siguiendo sus huellas. A la hora nos cruzábamos, ellos de retirada ante las condiciones de la montaña, y yo tras cruzar informaciones, dispuesto a continuar. La temporada hace meses que terminó y en las últimas fechas ha caído alguna nevada. Por mi parte no lo veía tan mal y en apenas media hora amanecía y podría sopesar mejor la situación, de todas formas saber que estaba solo en estas circunstancias no me hacía ni pizca de gracia.
Técnicamente la montaña es sencilla pero las dificultades se encuentran al final, con un corredor de unos 200m y una pequeña arista de roca que te saca a una pala de nieve para completar los últimos 50 o 100m de desnivel. El corredor me puso los bellos de punta y me hizo poner el 200% de mis sentidos y energías. La nieve era penosa, con una pequeña costra y polvo por debajo, pero sobre todo la caída de mas de 2000m por debajo, me ponía en vilo a cada paso, tampoco favorecían la situación mis crampones y piolet alquilados, que no han visto una lima en su vida. A la salida del corredor me encaramé a la arista de roca y me entró el “canguelo” y pensé en lo buena que habría sido la cuerda que llevaba mi compañero guía. Sin ganas de exponer más y viendo la cumbre a tan solo unos metros decidí bajar al calor de los míos.
Por su parte los niños han vivido una experiencia diferente, aunque no tuvieran luz eléctrica, ni baño, ni las comodidades que acostumbran, lo han pasado muy bien jugando y compartiendo sus cosas con otros niños.
Ahora nos encontramos ya en Bolivia después de tres intentos de atravesar la frontera por el paso de Ollagüe y sus respectivos retrocesos al punto de partida. Una vez remolcados por el amable Jaime, que nos recogía ya entrada la noche y dispuestos a echar una cabezadita en nuestro buen amigo japonés, que como cabía de esperar sigue haciendo de las suyas, en esta ocasión recalentándose lo más grande y tirando todo el líquido del radiador, en fin, una odisea. Al día siguiente más de lo mismo, y en el mismo lugar, aunque ahora ya íbamos prevenidos y volvimos por nuestro propio pie. Por lo visto es que este paso no le gustaba a nuestro amigo y hemos tenido que buscar otro, el de Tambo Quemado. Por cierto el sitio espectacular, lagunas, volcanes, flamencos, llamas y un sinfín de atractivos naturales, aunque mi mirada se queda clavada en el imponente volcán del Nevado Sajama, a escasos kilómetros de la frontera y cumbre más alta de Bolivia, qué casualidad que por aquí si quería pasar el amigo, al final va a ser que me quiere bien.
Como no podía ser de otra manera la primera parada fue en el pueblo de Sajama. Tras los pertinentes permisos de entrada al Parque Nacional y de recabar la información necesaria, esa misma tarde me fui para la montaña con intención de alcanzar a un guía con un Alemán que habían partido el día anterior. Sobre el papel parecía un plan perfecto pero normalmente la realidad suele variar un poco. En esta ocasión a mitad de la tarde se cubrió el cielo y comenzó a nevar levemente, aún estaba bastante lejos del “Campo Alto” a 5700m, donde se encontraban mis supuestos compañeros. Durante un largo tiempo dudé si volverme, pero finalmente decidí quedarme allí mismo, a unos 4500m y esperar a ver como evolucionaba el tiempo por la noche. A las 2:30 de la madrugada, con el cielo estrellado, salí dispuesto a coger a mis compañeros y hacer la cumbre. En apenas dos horas me planté en el campo alto, al ver su tienda vacía continué siguiendo sus huellas. A la hora nos cruzábamos, ellos de retirada ante las condiciones de la montaña, y yo tras cruzar informaciones, dispuesto a continuar. La temporada hace meses que terminó y en las últimas fechas ha caído alguna nevada. Por mi parte no lo veía tan mal y en apenas media hora amanecía y podría sopesar mejor la situación, de todas formas saber que estaba solo en estas circunstancias no me hacía ni pizca de gracia.
Técnicamente la montaña es sencilla pero las dificultades se encuentran al final, con un corredor de unos 200m y una pequeña arista de roca que te saca a una pala de nieve para completar los últimos 50 o 100m de desnivel. El corredor me puso los bellos de punta y me hizo poner el 200% de mis sentidos y energías. La nieve era penosa, con una pequeña costra y polvo por debajo, pero sobre todo la caída de mas de 2000m por debajo, me ponía en vilo a cada paso, tampoco favorecían la situación mis crampones y piolet alquilados, que no han visto una lima en su vida. A la salida del corredor me encaramé a la arista de roca y me entró el “canguelo” y pensé en lo buena que habría sido la cuerda que llevaba mi compañero guía. Sin ganas de exponer más y viendo la cumbre a tan solo unos metros decidí bajar al calor de los míos.
Por su parte los niños han vivido una experiencia diferente, aunque no tuvieran luz eléctrica, ni baño, ni las comodidades que acostumbran, lo han pasado muy bien jugando y compartiendo sus cosas con otros niños.
8 comentarios:
Menos mal, una foto de Reyes. ¡Hooola! Qué mona, se le ve que lo está pasando bien. Como Javier con la nieve, como diciendo "Joder papi, aquí no hay ni dios, hace un frío de cojones y yo no tenía ganas de mear ¿para qué hemos parado?". En fin, los niños...
No me quiero ni imaginar a estos dos angelitos en una jornada de 1000Km después de otra de 800Km. Son los míos y cuando se despiertan después de haberse quedado dormidos a la salida de Málaga, allá por Paradas, y no hay quien los calle. San Deuvedé tendría que estar en rojo en el calendario.
En fin, reclamo un mapa mundi con la previsión de itinerario, como los de la vuelta ciclista y todo eso.
Besos a todos...
hola familia. Me he levantado temprano para ojear el blog y me ha encantado encontrar unas fotitos de Reyes y de los niños. no habrá día que no me acuerde de vosotros. hablamos las amigas que nos encantaría que tsambién Reyes nos contara la aventura desde el otro lado. lo delos niños está comprobado que todo lo dicho hasta el viaje no era real. Después de todas estas aventuras ya son capaces de dormir en cualquier parte y de un tirón. Animos a todos y disfrutad. De momento no dejo que vaya Raúl a arreglar esa tartana que Paco ha comprado. Si me quedo yo tirada en la nada me dan los siete males. Pero vosotros sois valientes. un beso grande y en especial a los niños.
Buenos dias paco y compañia
Espero que los niños y Reyes esten bien y esteis pasando un maravilloso trayecto hacia tu objetivo.
Aqui te puedo asegurar que tu hermana os echa mucho de menos y esta deseando contantar contigo
Si puedes hazlo respecto a la aventura me parece fantastico y si tienes la posibilidad le das la enhorabuena a castas de mi parte.
Un beso muy grande pare Reyes, Javier y la pequeña Verina
Hola chicos soy Mariluz
Estoy tratando de organizar un viaje a Mexico del 22 al30 de Diciembre, pero solo vamos si podemos quedar con vosotros.
Llamame o dime a que hora te puedo llamar para hablar.
Os echamos mucho de menos beso para todos.
Tengo que confirmarlo antes del 5.
Bueno, ya veo que va saliendo la aventura. Estoy con Rocío, me gustaría conocer la crónica desde el ángulo de mi querida amiga Reyes, que está demostrando tanto valor como Paco. Ya habrá tiempo. Ahora ánimo y un beso para los cuatro. Lali.
hola a todos !como me ha gustado veros a todos! !bueno sobre todo a los ni�os! me acuerdo mucho de ellos. Espero que os valla todo bien. Cuidaros mucho. !!Darles muchos besitos a Javier y a Vera!!.
Hola de nuevo.
Felicidades, Reyes, que pases un buen día.
Estoy en Sevilla y de aquí os mandan también muchos besos y mucho ánimo. Lali.
Primo, envidio cada paso que dan y puedo sentir en tus palabras la aventura y felicidad que esta significando este viaje junto a los tuyos. Saludos a los cachorros se ven de maravilla en la nieve, cariños a la prima y al resto de la familia en España.
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